La secadora ha sido uno de los inventos más espectaculares del hombre. No obstante, se han creado muchos mitos alrededor de ella, como que daña el textil, ¿es cierto? Veamos algunas de las cosas que se dicen de ella y qué hay de cierto en tales afirmaciones.
Dañan la ropa
Esta es posiblemente la afirmación sobre la secadora que más se escucha. No es cierto que la secadora dañe la ropa, sino que la daña más la exposición constante a los rayos de sol, por lo que el efecto de la secadora es todo el contrario: protege y cuida tu ropa y la mantiene por más tiempo en buen estado.
De hecho, tender la ropa al sol perjudica al color y la textura de los tejidos.
Gastan mucha electricidad
Nada más lejos de la realidad. Claro, el gasto que haga dependerá mucho de cuántas cargas hagas a la semana, pero si no la sobrecargas y te organizas bien no tienes por qué ver incrementado el recibo de la luz.
Encoge la ropa
Este es otro de los mitos más sonados de la secadora. Como el secado se realiza con aire caliente, hay quienes afirman que la ropa se encoge. Las secadoras cuentan con un programa para cada tipo específico de ropa, por lo que puedes seleccionar en cada momento el ciclo correcto para los tipos de prendas que estés metiendo. Por ejemplo:
- Temperatura alta para ropa de algodón, vaqueros, toallas y ropa de cama.
- Temperatura media para camisas, pantalones de vestir y telas sintéticas.
- Temperatura baja para los tejidos de lycra, ropa elástica y todas aquellas prendas que indiquen en la etiqueta ‘secado ligero’.
Es importante que consultes las etiquetas de tu ropa, ya que hay algunas prendas especiales como las que tienen elásticos y gomas que podrán sufrir daños con la secadora. Asegúrate de que puedes secarlas en máquina.
Beneficios de usar la secadora
Ya que hemos visto los mitos falsos sobre la secadora y su uso, vamos a repasar brevemente algunos de los beneficios de usar la secadora para tu ropa.
- Secar prendas grandes sin esfuerzo ni problemas. Esto es especialmente cómodo para sábanas, mantas, edredones y fundas nórdicas.
- Reduce las arrugas de las prendas, con lo cual puedes evitar planchar muchas de ellas.
- El aroma del suavizante se mantendrá por más tiempo en la ropa.
- Elimina los ácaros que pudieran tener las prendas.
- Si vives en la ciudad, protege tu ropa de la polución a la que podría estar expuesta al tenderla en el exterior.
A pesar de estos beneficios y de los mitos desmentidos, se recomienda que aproveches los días de sol para airear tu ropa y secarla al aire libre. Así consumirás menos energía y pondrás tu granito de arena en el cuidado del medio ambiente. Pero por lo demás, disfruta de tu secadora y de ropa en buen estado.